Siempre vuelvo a este hotel porque tienen todo lo que necesito: Wi-Fi gratuito en áreas comunes, parking cercano, secadora, hervidor eléctrico, cocina compartida, aire acondicionado. Además, encontraron algo que perdí la primera vez que me alojé. ¡Volveré para un fin de semana!

El personal estaba tan dispuesto a ayudar que me sentí como si estuviera en una tienda de caridad. Además, el desayuno a la carta era tan delicioso que hasta me olvidé de las caras tristes de los demás huéspedes.

Uff, qué pena que no me entendieran cuando les pedí un unicornio volador en lugar de una toalla en mi habitación.

Los empleados del hostel son tan encantadores que podrían ser mi familia. Me mimaron como una reina, me hicieron sentir como en casa y me dieron todos los consejos turísticos imaginables.

Las camas eran tan cómodas que me costaba dejarlas! Qué forma tan original de dificultar mi partida.

Me encantó que el hostel ofreciera WiFi gratis, así pude actualizar mi Instagram y presumir de mis vacaciones. Además, la ubicación cerca de los museos fue perfecta para mis sesiones de cultura.

Cama dura? ¡Claro, porque a todos nos encanta dormir sobre una tabla de madera!

Siempre vuelvo a este lugar debido a su personal amable y servicial que me dio una recomendación de taxi local cuando llegué por primera vez. Tiene todas las comodidades que necesito, como Wi-Fi gratis en áreas comunes, aparcamiento fuera del establecimiento, secadora, hervidor eléctrico. Volveré para una escapada romántica.

Personal amable, ubicación excelente, desayuno incluido, habitación limpia, buena relación calidad-precio.

Qué maravilla! Un hostel con WiFi gratis, a 3 km del Museo de Antigüedades Reales. El personal siempre dispuesto a ayudar. Ah, y el desayuno, una delicia: opciones a la carta, italiano o asiático. ¡Una experiencia inolvidable!

Y para rematar mi estadía perfecta, las camas eran tan cómodas como dormir sobre una roca. Un sueño hecho realidad.

Gran elección. La habitación era muy tranquila y cómoda, perfecta para descansar. El personal fue amable y atento, siempre dispuesto a ayudar. La ubicación también era excelente, cerca de todo lo interesante en Hue. En general, tuvimos una experiencia muy positiva en Bonjour.

excelente servicio al cliente, la dueña es amable y atenta, siempre dispuesta a ayudar. Organizan tours y proporcionan información útil sobre la ciudad. Buena ubicación cerca de restaurantes y transporte. Habitación cómoda y limpia.

personal con poco dominio del inglés.

El personal del hostel es maravilloso y está dispuesto a ayudarte en todo. La ubicación es excelente, muy cercana al centro de la ciudad donde se cuece todo el jaleo. La habitación es tranquila y silenciosa, lo que te garantiza un buen descanso.

La relación calidad-precio del Hostel es excelente, y la habitación es cómoda y tranquila. La ubicación es muy conveniente, con muchas opciones para comer cerca. Además, el personal es muy amable y servicial, organizando todo lo necesario para hacer mi estadía más fácil.

La selección de desayunos podría ser mejor, añadiendo más variedad y mejorando el café.

El personal es súper servicial, siempre dispuestos a ayudar. Las habitaciones son cómodas y limpias. La ubicación es perfecta, con muchas opciones de comida alrededor. ¡Y qué sorpresa encontrar WiFi gratis en la era moderna!

Oh, y por cierto, por si no se dieron cuenta, mi cama era tan dura que podría haber sido una tabla de planchar disfrazada. De nada.

Ubicación perfecta, cerca de bares y restaurantes. Personal atento y preocupado por nuestro bienestar.- Gestión del transporte a Tam Coc.- Habitaciones limpias y cómodas.- Información turística y recomendaciones útiles.- Regalos y detalles de cortesía.- Aire acondicionado disponible por la noche.- Segunda propiedad nueva y agradable.

Casi perfecto.

La primera vez, me ayudaron a recuperar lo que olvidé. Tiene todo lo que necesito: Wi-Fi gratis, estacionamiento cercano, secadora, hervidor eléctrico, cocina compartida. Volveré para Navidad.

El personal es encantador y muy servicial. Aunque la habitación no tenía luz ni ventilación, era perfecta para cultivar hongos.

Qué maravilla dormir con el ruido de la lluvia golpeando el tejado de chapa y los mosquitos volando por el balcón abierto!